lunes, 20 de noviembre de 2006

Día de cursilerías...


Con respecto a mi noviazgo: "Después de la tormenta, viene la calma"... Y haciendo honor a lo primero que motivó la creación de este espacio: le necesidad de decirle a la mujer que amo, lo que siento; estuve meditando acerca de lo que siento, y de la manera como manejo mis sentimientos ante uno de mis mayores problemas y defectos: mi orgullo... En un momento de inspiración, de aquellos que muy de vez en cuando me llegan y me dan la iluminación necesaria para escribir algo así de cursi, pero que sé, en algún momento a todos nos toca, llegó a mí, la reflexión que les transcribiré a continuacíón...
ADVERTENCIA: La siguiente reflexión puede contener material empalagoso para quien no esté enamorado. Se recomienda la lectura del mismo en compañía de alguien enamorado o un romantico responsable...

El verdadero amor es tan fuerte como para amar al otro conociendo sus limitaciones y sus flaquezas y crecer a su lado. En cambio el falso amante vive de fantasías y, cuando disminuye el romance huye, porque no puede amar a personas reales. Por eso el amor fácil no dura, porque detrás de él se esconde un temor al compromiso y a enfrentar la realidad.
Amar es enamorarse de la realidad y la realidad siempre viene con defecto s y con dificultades. Y quien sabe amar acepta esas fallas y, Sin Ser víctima, las ve como retos para crecer. Donde hay amor, siempre hay crecimiento.
Por lo mismo se equivocan por igual quienes confunden el amor con el sacrificio y los que evaden todo sacrificio en el amor. Amar no es vivir sufriendo y renunciando a todo al lado de alguien por unas migajas de cariño, sexo y compañía. Amar no es regalar la propia autonomía, opacarse, negarse siempre a sí mismo y vivir como mártir
¿Por qué? Porque el amor es crecimiento y expansión: cuando dos seres se aman, avanzan, mejoran y se realizan. No se enredan con fantasías perfeccionistas, se aceptan con sus defectos y potencian sus dones. Y para lograrlo, cada cual se sacrifica o entrega espacios de libertad y de vida, y lo hace de buena gana y con alegría. De hecho, siempre que uno elige algo o a alguien, renuncia a otras realidades, llámese esto sacrificio o como quiera que se llame. Entonces me pregunto ¿Crezco con mi amor? ¿Soy más o menos? Si no crezco, lo mejor será cambiar, porque estaría llamando amor a algo que no lo es.
En el amor hay esperanza, confianza, alegría y también libertad. Cuando uno ama respeta al otro, lo admira y valora su individualidad y su dignidad. Uno ama cuando se acepta, se quiere y es capaz de manejar su propia soledad. Si uno sabe amar también sabe comprender y perdonas, sabe exigir y ceder, sabe decir sí y decir no cuando sea conveniente.

Maricaditas del día

  • Parece que volvió la época buena para mi relación sentimental, ojalá dure mucho así, estoy mamado de mis peleas tontas incontrolables...
  • Ya casí esta todo listo para la fiesta de cierre de año de administrativos de la Facultad... Nos merecemos la celebración...
  • Entregué mi primer examen final, creo que fue un muy buen comienzo de fin de semestre... Esperemos la nota...
  • A esa persona que está pasando por un mal momento, le recuerdo que aquí -o donde me necesite- estaré para lo que quiera

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